. Por segunda oportunidad, el denominado Movimiento Social Patriota llevó a cabo una intervención en la fachada del Parque por la Paz Villa Grimaldi, hecho que parece relacionado con destrozos a vehículos estacionados frente al sitio y mensajes telefónicos ofensivos dirigidos a integrantes del equipo.

El cartel dejado en la madrugada de este 10 de enero de 2019 por el grupo neofascista que decía “No lucren más con los DDHH. MSP”, es coincidente con otro mensaje, instalado de la misma forma el pasado 30 de agosto, Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, en el que se leía “Aquí la izquierda lucra y adoctrina con la memoria de chilenos torturados”, también firmado por dicho movimiento.

Esta agresión del grupo neofascista se enmarca en un contexto en el que la política oficial, junto a una serie de acciones de grupos de ultra derecha, apuntan al negacionismo y al intento de borrar las huellas de los crímenes de la dictadura, e intentan amedrentar a las y los trabajadores de los espacios de memoria que trabajan por los derechos humanos en Chile.

Las organizaciones que integramos la Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y Caribeños, presentes en doce países del continente, hemos seguido con preocupación hechos como los ocurridos a Villa Grimaldi, los reiterados intentos de desvirtuar el guión museográfico del Museo Memoria y Derechos Humanos o la agresión sufrida en la Casa Memoria José Domingo Cañas, cuando grupos desconocidos destrozaron parte de sus instalaciones; así como el intento de demolición del ex Cuartel Terranova, acción que fue impedida por activistas de derechos humanos, vecinos y comunidades eclesiales de base.

En este caso, el autodenominado Movimiento Social Patriota, insiste en transmitir el mensaje de que las acciones que reivindican la memoria y los derechos humanos sirven para “lucrar” y son promovidos desde la “izquierda”. Esto es claramente un intento de desacreditar la labor de defensoras y defensores de derechos humanos en el país. Se trata de un discurso frecuentemente utilizado por distintas fuerzas afines o participantes directos de los gobiernos de corte dictatorial en el continente, quienes se ven amenazados por los avances en temas de justicia frente a las graves violaciones a los derechos humanos cometidas en el pasado reciente.

Como RESLAC y desde Argentina, Brasil, Chile, Colombia, El  Salvador, Guatemala, Haití, México, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, demandamos al Estado chileno que en virtud de sus obligaciones frente a los derechos humanos, al derecho a la verdad y su deber de memoria, tome cartas en el asunto investigando y sancionando este tipo de acciones destinadas a impedir el goce de derechos consagrados en las leyes nacionales e internacionales. En este sentido, instamos a las instituciones estatales a dar continuidad a la demanda de las organizaciones de víctimas y sus familiares, de derechos humanos y otras organizaciones sociales, en función de legislar e impulsar políticas públicas adecuadas para la protección de los Sitios de Memoria, como ha sido relevado esta semana por un Sitio de Memoria de Chile frente a la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados y por la Directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Consuelo Contreras.

Nos sumamos a la declaración de Villa Grimaldi, respecto a que la impunidad frente a estos casos, pone en jaque la verdadera convivencia democrática y posterga la posibilidad de sanar la herida que aún enfrenta la sociedad chilena en relación a los secuestros, torturas y asesinatos cometidos durante la dictadura cívico-militar, en tanto que no se avance de manera decidida hacia la construcción de la verdad y la justicia sobre estos hechos aberrantes.

Atentamente,

Verónica Torras

Directora de Memoria Abierta – Argentina

Por la Coordinación de la RESLAC

Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y Caribeños -RESLAC

Archivo Provincial de la Memoria –  Argentina

Centro Cultural por la Memoria de Trelew – Argentina

Comisión de Homenaje a las Víctimas de los CCD Vesubio y Protobanco – Argentina

Museo de la Memoria de Rosario – Argentina

Parque de la Memoria – Argentina

Memoria Abierta – Argentina

Casa do Povo – Brasil

Museo de la Inmigración– Brasil

Memorial de la Resistencia – Pinacoteca del Estado de San Pablo –  Brasil

Núcleo de Preservación de la Memoria Política – Brasil

Memorial  Paine: Un lugar para la memoria – Chile

Museo de la Memoria y los Derechos Humanos – Chile

Estadio Nacional – Chile

Comité de Derechos Humanos Nido Veinte – Chile

Casa Memoria José Domingo Cañas – Fundación 1367 – Chile

Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi – Chile

Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos Colonia Dignidad – Chile

Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas -F.A.S.I.C- Chile

Centro de Memoria, Paz y Reconciliación – Colombia

Museo Casa Memoria de Medellín – Colombia

Red Colombiana de Lugares de Memoria (30 sitios de origen en las comunidades)

Museo de la Palabra y la Imagen  – El Salvador

Instituto Internacional de Aprendizaje para la Reconciliación Social -IIARS-  Guatemala

Memorial para la Concordia – Guatemala

Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos -CALDH- Guatemala

Dévoir de Memoire – Haití

Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas – México

Sociedad Civil Las Abejas – México

Centro de Investigaciones Históricas de los Movimientos Sociales – México

Museo de las Memorias: Dictaduras y Derechos Humanos – Paraguay

Dirección de Verdad, Justicia y Reparación – Defensoría del Pueblo – Paraguay

Asociación  Paz y Esperanza – Perú

Movimiento Ciudadano Para Que No Se Repita – Perú

Asociación Caminos de la Memoria – Perú

Memorial de la Resistencia Dominicana – R. Dominicana

Centro Cultural Museo de la Memoria – MUME  – Uruguay

Fundación Zelmar Michelini – Uruguay

Proyecto de Memoria Histórica (HMP) – Nueva York