Hoy 30 de abril, Casa Memoria José Domingo Cañas celebra su cuarto aniversario.
Este sitio fue recuperado para rescatar la memoria de lo ocurrido cuando la casa de este lugar fue transformada en un centro Clandestino de Tortura, Secuestro y Exterminio, como parte de una red de centros clandestinos de tortura manejados por la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA), bajo la última dictadura militar en nuestro país.
Nos propusimos reivindicar a los hombres y mujeres que asesinaron o hicieron desaparecer de José Domingo Cañas, o Cuartel Ollagüe, como lo llamaban los agentes de la DINA, identificar a los responsables de los crímenes cometidos y de esta manera aportar a la construcción de una sociedad en la que prime la justicia y el respeto por los derechos humanos, como legado a las nuevas generaciones de jóvenes en Chile.
Los obstáculos encontrados en el camino son conocidos por ustedes, pero queremos resaltar que los hemos vencido uno a uno. La casa original fue vendida a un empresario inescrupuloso quien la derribó horas antes de ser declarada Monumento Nacional.
Diferentes organizaciones se formaron durante ese período, las dificultades de esta lucha y la frustración que representó la destrucción del inmueble, nos desgarró emocionalmente y en ocasiones no supimos mantener la unidad. A pesar de no contar con recursos, se discutían diferentes propuestas de qué hacer con el sitio.
La recuperación de este lugar fue el resultado de la tenacidad de familiares, sobrevivientes, activistas de derechos humanos, vecinos, organizaciones de jóvenes y diferentes colectivos que se sumaron. Ha sido un trabajo conjunto, pero no cabe duda que Laura Moya se constituyó en el motor de esta lucha. Su tenacidad y liderazgo permitió los logros que hoy compartimos.
El símbolo más evidente de esta decisión, es la velatón de los días miércoles, que se ha llevado a cabo durante 15 años.
La Fundación 1367, finalmente el 30 de abril del 2010, inauguró Casa Memoria José Domingo Cañas, donde se formó el Consejo Consultivo, compuesto por voluntarias y voluntarios, así como también algunos profesionales.
No existen recetas ni manuales de qué hacer en un lugar donde se cometieron crímenes contra la humanidad, las experiencias de un memorial no son transferibles automáticamente a otro. A pesar de los diferentes centros DINA está dentro de una misma historia de país, los contextos en cada lugar, son diferentes:
- el momento en que se recupera,
- la superficie del sitio,
- la proximidad o distancia con el centro cívico,
- la permanencia de la estructura original o la devastación del lugar
- las organizaciones que participan en el proceso
- recibir apoyo o ser ignorados por instancias públicas como municipalidad, ministerios, etc.
- Cual fue el uso del lugar antes y después que fuera centro de detención
Los mecanismos de toma de decisión y los métodos de trabajo varían en consideración a lo reseñado anteriormente. Pero hubo que tomar decisiones y echar a andar. Es aquí donde el Consejo Consultivo de Casa Memoria ha desempeñado su tarea:
- ha creado métodos de trabajo,
- diseñado acciones de conmemoración de compañeras y compañeros desaparecidos, asesinadas y torturadas
- construido organización,
- ha propuesto políticas de memoria en conjunto con otro sitios,
- ha investigado en el vecindario y archivos jurídicos,
- promocionado el teatro comprometido
- ha aportado creativamente en educación en derechos humanos y memoria en sitios
- participa activamente en la promoción de derechos humanos en el presente
- desarrolla labores de monitoreo y control social sobre el actuar de la fuerza policial en las movilizaciones sociales.
El Consejo Consultivo de Casa Memoria José Domingo Cañas ha desarrollado su trabajo en diferentes áreas en las que se han ido formando equipos, podemos señalar a:
- Educación que realiza visitas guiadas, talleres y seminarios, crea material pedagógico, dirigido a estudiantes secundarios y universitarios.
- Cultura implementa actividades de teatro, lanzamiento de libros, seminarios y las actividades de conmemoraciòn
- Memoria investigación de la historia del sitio, la de los compañeros y compañeras que desaparecieron del sitio.
- Observadores DDHH seguimiento en terreno sobre el actuar policíaco, elaboración de informes anuales, transferencia de experiencia organizativa, contribuyendo al pleno goce de los derechos humanos y a la igualdad de oportunidades para toda la población en nuestro país.
- Participamos activamente en la mesa de Colonia Dignidad, Red de Educación, Red de Archivos (documental y Oral) y la Red de sitios de Memoria.
- Biblioteca José Marti
Afrontamos día a día distintos desafíos y problemas, algunos tienen el tamaño de una termita, o el frio en invierno. Nuestra Casa ha sido objeto de robo en dos oportunidades, como forma de amenazarnos, una advertencia sobre el estado de vulnerabilidad en el que nos encontramos por la falta del Estado de Chile de Políticas de Memoria, verdad y justicia para quienes violaron y aún violan los derechos humanos, pero continuamos.
La pérdida más grande para nosotras y nosotros ha sido la partida sin retorno de Laura Moya, es el hecho que más nos duele, aunque contamos con su legado y su recuerdo.
El trabajo voluntario, que realizamos está basado en el compromiso y creatividad como principal aporte al logro de los objetivos de Casa Memoria, es una manera en que la sociedad civil organizada contribuye para alcanzar bases sólidas en la convivencia democrática, ejercer y proteger el derecho a la dignidad de los pueblos. Sin embargo, por sus características, en el trabajo voluntario no siempre es posible la permanencia de personas interesadas, lo que se traduce en rotación de profesionales, fuga de conocimientos y por sobre todo, la imposibilidad del ejercicio pleno de la sociedad chilena de conocer su pasado, en este caso, la memoria de José Domingo Cañas.
El trabajo voluntario por la memoria no es el sustituto de los deberes del Estado en su obligación de velar por la memoria, la verdad y la justicia ante crímenes contra la humanidad, cometidos bajo sus órdenes durante la dictadura militar y en cualquier momento de la historia de nuestro país.
En este sentido, el vacío de una política de memoria nacional, la falta de protección de los sitios, la carencia de recursos que hagan posible ejercer el derecho del pueblo chileno a conocer su historia reciente, nos preocupa y tenemos la obligación de denunciarla. Como Casa Memoria José Domingo Cañas no nos quedamos en la queja, sino que hemos diseñado propuestas viables, basadas en la experiencia, acerca de la forma de continuar en forma permanente este trabajo hacia la comunidad. La palabra la tienen las autoridades, deben decidir sobre su responsabilidad con la historia y la ciudadanía que les confió los cargos públicos.
Nosotras y nosotros en el Consejo Consultivo de Casa Memoria, y su directorio, continuaremos con la decisión de luchar por nuestros objetivos, a nivel internacional en la red Internacional de Sitios de Conciencia, a nivel nacional junto a otros sitios, en la mesa de Colonia Dignidad, en la red de educación de sitios de memoria, acercándonos a los vecinos y organizaciones territoriales, en las calles monitoreando la acción policial y ejerciendo el derecho a la libertad en su más amplia expresión y el respeto por la persona humana.
Porque esa es precisamente la causa por la lucharon los hombres y mujeres que fueron hechos desaparecer de este lugar, porque esa es la mejor forma de rendir un homenaje a todos y todas los que por aquí pasaron.
Compañeras y compañeros, En Casa memoria José Domingo Cañas
- Nadie está olvidado
- Por el reconocimiento de los sitios que resguardan la memoria
- Por la dignidad de los que aquí fueron reprimidas y reprimidos
- Por la verdad sobre el destino final los y las detenidas desaparecidas
- Por el juicio y castigo a los responsables de los crímenes
- Venceremos
Fotografías, gentileza de Erika Spuler.